Efesios 1:3

Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo:

Las doxologías en las cartas implican un sentido real de gracia experimentado por los escritores y sus lectores ( 1 Pedro 1:3 ). Efesios 1:3 expone resumidamente el Evangelio de la gracia de Dios: la obra de amor del Padre, Efesios 1:3 (nos eligió para la santidad, Efesios 1:4 ; para la filiación, Efesios 1:5 ; para la aceptación, Efesios 1:6 ); la obra de amor del hijo, Efesios 1:7 (redención; conocimiento del misterio de Su voluntad, Efesios 1:9 ; una herencia, Efesios 1:11 ); la obra de amor del Espíritu Santo, Efesios 1:13 (sellamiento; dar prenda de la herencia, Efesios 1:14).

Bendito, [ Eulogeetos ( G2128 ), usado solo de Dios: eulogeemenos ( G2127 ), de los hombres] sea el Dios y Padre de ... Cristo - así el Dios y Padre de nosotros que estamos en Él ( Juan 20:17 ). Dios es "el Dios" del hombre ( Efesios 1:16 ) Jesús, y "el Padre" del Verbo Divino. [Eulogesas (Aoristo), 'nos bendijo', no 'nos ha bendecido'; el consejo original pasado de Dios.] Así como en la creación ( Génesis 1:22 ), así en la redención ( Génesis 12:3 ; Mateo 5:3 ; Mateo 25:34 ) Dios 'bendice' a Sus hijos de Su gracia; no en meras palabras, sino en hechos. Nuestra bendición a Él es acción de gracias por Su gracia.

Nosotros - todos los cristianos.

Bendiciones , [ en ( G1722 ) pasee ( G3956 ) eulogia ( G2129 ) pneumatikee ( G4152 )] - 'con toda bendición otorgada por espíritu'; 'toda bendición posible para el tiempo y la eternidad que el Espíritu tiene para otorgar'. El judaísmo tenía bendiciones, pero no la bendición del Espíritu. La Trinidad aparece aquí, como a lo largo de esta carta.

En lugares celestiales. Una frase cinco veces en esta carta, no en otra parte ( Efesios 1:20 ; Efesios 2:6 ; Efesios 3:10 ; Efesios 6:12 , margen. Nuestro hogar ( Filipenses 3:20 ), donde está nuestra esperanza ( Colosenses 1:5 ), y de donde viene el Espíritu ( Hebreos 6:4 ; Juan 6:32 ). La ascensión de Cristo nos introduce en los lugares celestiales que nos fueron vetados por nuestro pecado. Compare el cambio hecho por Cristo ( Colosenses 1:20 ; Efesios 1:20 ). Mientras Cristo en la carne tenía la forma de un siervo, el pueblo de Dios no podía realizar plenamente sus privilegios celestiales como hijos. Ahora, "nuestra ciudadanía (griego) está en los cielos" ( Filipenses 3:20 ), donde nuestro Sumo Sacerdote siempre nos 'bendice'. Nuestros "tesoros" están allí ( Mateo 6:20 ), nuestros objetivos y afectos ( Colosenses 3:1 ), nuestra esperanza ( Colosenses 1:5 ; Tito 2:13 ), nuestra herencia ( 1 Pedro 1:4 ). El don del Espíritu, la fuente de las "bendiciones espirituales", es en virtud de que Jesús ascendió allí ( Efesios 4:8 ).

En Cristo - el centro y fuente de toda bendición.