Pusieron el altar sobre sus bases , es decir, en el lugar donde antiguamente estuvo; porque el miedo estaba sobre ellos, a causa de la gente de esos países. Y por eso se apresuraron más, no sea que se les estorbe. La aprehensión de los peligros debería animarnos en nuestro deber. ¿Tenemos muchos enemigos? Tenemos más necesidad de tener a Dios como nuestro amigo y de mantener nuestra correspondencia con él. Algunos traducen la cláusula, aunque el miedo se apoderó de ellos; es decir, aunque temían mucho a sus vecinos malvados, no obstante, no desistían de restaurar la adoración de Dios.

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