Cristo alimenta milagrosamente al pueblo; se niega a dar señal a los fariseos; advierte a sus discípulos que se cuiden de la levadura de los fariseos y de la levadura de Herodes; da al ciego la vista; reconoce que es el Cristo, que debe sufre y resucita; y exhorta a tener paciencia en la persecución de la profesión del evangelio.

Anno Domini 31.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad