CAPÍTULO XIII

Este capítulo denuncia fuertes juicios contra los mentirosos

profetas que lisonjeaban al pueblo, en medio de su pecado

y peligro, con falsas esperanzas de paz y seguridad , 1-9.

El trabajo de estos engañadores se compara bellamente con un frágil

e insolente pieza de construcción, que nunca puede resistir

los elementos abatidos del cielo, (las fuerzas caldeas), que

Dios comisionará en su contra , 10-16.

En la parte restante del capítulo se denuncian los males contra

falsas profetisas que practicaban vanos ritos y adivinaciones,

con el fin de promover su propio beneficio engañando a las

personas , 17-23.

NOTAS SOBRE EL CAP. XIII

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