Pero la palabra del SEÑOR les era mandamiento sobre mandamiento, mandamiento sobre mandamiento; línea sobre línea, línea sobre línea; aquí un poquito, [y] allá un poquito; para que vayan y caigan hacia atrás, y sean quebrantados, atrapados y apresados.

(o) Porque no recibirán la palabra de Dios, cuando es ofrecida, viene de su propia malicia, si después de que sus corazones están tan endurecidos, que no la cuidan, como antes, ( Isaías 6:9 ).

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