Pero mientras los hombres dormían, vino su enemigo y sembró cizaña entre el trigo y se fue.

Un punto importante: La parábola se plantea, se presenta, como alimento espiritual, para instrucción del alma. El reino de los cielos, la Iglesia de Cristo, estrictamente hablando, incluye sólo a aquellos que están unidos bajo su dirección por los lazos de una fe común y sincera en él. Pero el Señor aquí, como a menudo, describe a la Iglesia tal como aparece en el mundo, tal como la tratamos en forma concreta. Su imagen está nuevamente tomada del trabajo del agricultor.

Un hombre ciertamente sembrará solo la mejor semilla que se pueda obtener en su campo si quiere una cosecha grande y abundante. Esa era también la costumbre de este labrador. Pero durante el tiempo en que los hombres, es decir, el hombre honesto promedio, solía dormir, su enemigo vino con cierta semilla maligna, una forma degenerada de trigo, cuyos tallos y espigas se parecen mucho al grano verdadero (trigo bastardo o cizaña) , y deliberada y maliciosamente sembró esta semilla de mala hierba en medio del trigo tan densamente como si no hubiera nada allí. Habiendo hecho su maldad, se fue. Sabía que el daño difícilmente podría descubrirse hasta que fuera demasiado tarde para remediar las cosas.

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