Salmo 6:1-10

1 Al músico principal. Con Neguinot. Sobre Seminit. Salmo de David. Oh SEÑOR, no me reprendas en tu furor ni me castigues en tu ira.

2 Ten misericordia de mí, oh SEÑOR, porque desfallezco. Sáname, oh SEÑOR, porque mis huesos están abatidos.

3 También mi alma está muy turbada; y tú, oh SEÑOR, ¿hasta cuándo?

4 Vuelve, oh SEÑOR; libra mi alma. Sálvame por tu misericordia

5 porque en la muerte no hay memoria de ti; ¿quién te alabará en el Seol?

6 Me he agotado de tanto gemir. Toda la noche inundo mi cama y con mis lágrimas empapo mi lecho.

7 Mis ojos están debilitados por el pesar; se han envejecido a causa de todos mis adversarios.

8 Apártense de mí todos los que obran iniquidad, porque el SEÑOR ha oído la voz de mi llanto.

9 ¡El SEÑOR ha escuchado mi ruego! ¡El SEÑOR ha aceptado mi oración!

10 Todos mis enemigos se avergonzarán y se aterrarán. Retrocederán y, de repente, serán avergonzados.

Salmo 6

En Neginoth (cf. el Salmo 4) sobre Seminith—el octavo—instrumento para la octava nota—o más probablemente, el bajo, pues se contrasta con Alamoth (el tiple, Salmo 46) 1 Crónicas 15:20, 1 Crónicas 15:21. En honda aflicción el salmista implora la misericordia de Dios para el alivio del castigo, que de otro modo debe destruírlo e incapacitarlo para el servicio de Dios. Asegurado de la respuesta favorable, reprocha con desdén a sus enemigos.

1. El salmista reconoce su culpabilidad al pedir alivio del castigo.

2. debilitado—como planta arrancada. (Isaías 24:4). mis huesos—La misma osameta. conmovidos—(Salmo 2:5)—sacudidos por el temor.

3. ¿hasta cuándo?—seguirá esto (Salmo 79:5)? y tú—la frase incompleta expresiva de fuerte emoción.

4. vuelve—en mi socorro; o bien, retorna, habiendo ya vuelto el rostro. por tu misericordia—como evidencia de la misma.

5. (cf. el Salmo 115:17; Isaías 38:18.) No hay incredulidad alguna en cuanto al estado futuro. El contraste se hace entre la escena de la vida y la tumba o, cheol, el mundo invisible de los muertos. te loará—en gratitud, por tus misericordias—

6. Con una fuerte figura se pinta la abundancia así como la intensidad de la tristeza.

7. carcomidos—desgastados, en expresión de debilitación general (Isaías 13:3; Isaías 38:10). envejecido—debilitado, obscurecido. descontento—tristeza mezclada con la indignación.

8, 9. Seguro de que Dios lo oye, repentinamente desafía a sus enemigos en palabras que significan que ya no los teme;

10. y que sabe que ellos a su vez serán chasqueados y aterrorizados o confundidos.

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