Y el rey, para convencer a Josafat de una sinceridad que de ninguna manera sentía, le dijo: ¿Cuántas veces te conjuro que no me digas nada más que lo que es verdadero en el nombre del Señor? Parecía celo por la verdad, pero en realidad era otra muestra de hipocresía.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad