Entonces Manahem, haciendo uso del ejército para reducir el país a la obediencia a sí mismo, derrotó a Tiphsah, una fortaleza en el madero occidental del Eufrates, que se rebeló contra su gobierno, y todos los que estaban en él, y sus costas desde Tirsah, el base desde la que salió en su campaña; como no le abrieron, se negaron a recibir a sus oficiales ya rendirle homenaje, por eso lo golpeó; y destrozó a todas las mujeres que allí estaban encinta, la más bestial forma de crueldad.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad