¿Y no tienes allí contigo a Sadoc y Abiatar, los sacerdotes? Estos dos hombres también defendieron la causa de David. Por tanto, todo lo que oigas de la casa del rey, se lo dirás a los sacerdotes Sadoc y Abiatar, con quienes David había acordado que se le enviaran tales informes.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad