Si alguien lleva carne santa en la falda de su manto, es decir, la carne de los sacrificios que se ha ofrecido, y con su falda toca pan o potaje, cualquier alimento sagrado que se empapó, o vino, aceite o cualquier carne, tal como se usó para ofrecer sacrificios o en conexión con comidas de sacrificio, ¿será santo? Y los sacerdotes respondieron y dijeron: No. Esto estaba de acuerdo con la Ley, Levítico 6:20 ; porque aunque el vestido mismo fue santificado por tal comida consagrada, no podía impartir santidad a alguien que, al descuidar la voluntad del Señor, se había vuelto impío.

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