Todos estaban avergonzados de un pueblo que no podía beneficiarlos, es decir, la vergüenza golpearía al pueblo de Judá por tomar este camino al buscar ayuda de Egipto, que no podría ser de ningún beneficio real para ellos, ni de ayuda ni de provecho, pero vergüenza y también oprobio. Ese sería el resultado, el bien merecido castigo que vendría sobre Judá por abandonar la confianza en Jehová solamente. El profeta aquí interrumpe tiene testimonio de advertencia para insertar un oráculo dirigido contra Egipto.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad