“De cierto os digo que lo pondrá sobre todo lo que tiene”.

Y no solo será bendecido, sino que se le dará el control total de todo lo que el Señor tiene. Se convertirá en segundo sólo el propio Maestro. Ahora humanamente hablando y en una situación humana que solo le podría pasar a una persona, oa unos pocos internos. Pero eso no es así en la economía de Dios. En la economía de Dios, el privilegio se les puede dar a todos. Juntos, su pueblo será puesto sobre todo lo que Él tiene. Y como hemos aprendido en otra parte, en esa posición de responsabilidad cada uno se deleitará en servir y ser el más humilde de todos, para que pueda ser como el Siervo del Señor Supremo. Porque Dios pone patas arriba todos nuestros valores.

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