El chivo expiatorio. Sobre el segundo macho cabrío se hace ahora la confesión (por primera vez en el rito) con la imposición de las manos del Sumo Sacerdote ( cf. la imposición de manos del oferente en cada sacrificio). El tratado de Mishna Yoma da el texto de esta oración. Luego, la cabra es llevada al desierto o tierra sin labrar, como constituye una gran parte del SE. Judá, especialmente después del exilio. Para algunas mentes, este llevarse el pecado sería simbólico, para otras, sin duda, una transacción real.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad