Reglas finales para el sacrificio, no especialmente dirigidas a Aarón, ya que se refieren a todas las personas que tienen la intención de sacrificar. Un becerro o cordero o cabrito ofrecido (como primogénito) debe guardarse hasta el octavo día ( cf. la regla de la circuncisión, Levítico 22:12 ). La ley es antigua; cf. Éxodo 22:29 f.

(Libro de la Alianza), donde se une a la ley de la ofrenda del primogénito que subyace en la práctica de la circuncisión. Para la prohibición del sacrificio de vaca y ternero en el mismo día, cf. Éxodo 23:19 ; tal vez en ciertos ritos prohibidos se trataba al becerro como evidentemente se trataba al cabrito. O el motivo puede haber sido similar al de Deuteronomio 22:6 .

Las ofrendas de agradecimiento, como las ofrendas de paz, deben ofrecerse con miras a la aceptación, es decir , con la observancia de todas las reglas. No se debe dejar nada para el día siguiente; cf. Levítico 7:15 , y, para la Pascua, Éxodo 12:10 ; contraste Levítico 7:16 ; Levítico 19:6 ; también (una regla más general) Éxodo 23:18 , La exhortación final a esta sección es breve, pero pone su énfasis, ahora familiar, en la santidad de todo el pueblo, y su conexión con la de Yahvé.

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