Levítico 22:1-33

1 El SEÑOR habló a Moisés diciendo:

2 “Di a Aarón y a sus hijos que traten con reverencia las cosas sagradas de los hijos de Israel, para que no profanen mi santo nombre en aquello que me han consagrado. Yo, el SEÑOR.

3 “Diles: ‘A través de sus generaciones, todo hombre de sus descendientes, que estando impuro se acerque a las cosas sagradas que los hijos de Israel consagran al SEÑOR, tal persona será excluida de delante de mí. Yo, el SEÑOR.

4 “‘El hombre de los descendientes de Aarón que sea leproso o padezca de flujo no comerá de las cosas sagradas hasta que esté purificado. El que toque alguna cosa inmunda por contacto con un cadáver, o la persona que haya tenido emisión de semen;

5 o quien haya tocado cualquier reptil y por tanto ha quedado impuro; o quien haya tocado a alguien impuro, fuera cual fuera su impureza;

6 la persona que lo toque quedará impura hasta el anochecer y no comerá de las cosas sagradas hasta que haya lavado su cuerpo con agua.

7 A la puesta del sol quedará purificado. Después podrá comer de las cosas sagradas, porque estas son su alimento.

8 “‘No comerá un animal mortecino ni uno despedazado, contaminándose por ello. Yo, el SEÑOR.

9 “‘Ellos, pues, guardarán mi ordenanza para que no carguen con la culpa por esto ni mueran por haberla profanado. Yo soy el SEÑOR, el que los santifico.

10 “‘Ningún extraño podrá comer de lo que es sagrado; ni el huésped del sacerdote ni el asalariado lo podrán comer.

11 Pero la persona que el sacerdote haya comprado con su dinero podrá comer de ello. Y los que hayan nacido en su casa, estos podrán comer de su alimento.

12 Si la hija del sacerdote se casa con un hombre extraño, ella no podrá comer de la ofrenda alzada de las cosas sagradas.

13 Pero si la hija del sacerdote ha quedado viuda o está divorciada, y no teniendo hijos ha vuelto a la casa de su padre como en su juventud, ella podrá comer del alimento de su padre. Pero ningún extraño comerá de él.

14 “‘El que por inadvertencia coma algo sagrado añadirá a ello un quinto de su valor y lo dará al sacerdote junto con lo sagrado.

15 No profanarán, pues, las cosas sagradas que los hijos de Israel apartan para el SEÑOR,

16 haciendo que ellos carguen con la culpabilidad cuando coman de sus cosas sagradas. Porque yo soy el SEÑOR, el que los santifico’”.

17 El SEÑOR habló a Moisés diciendo:

18 “Habla a Aarón y a sus hijos, y a todos los hijos de Israel, y diles que si alguno de la casa de Israel o de los extranjeros en Israel presenta su sacrificio, en cumplimiento de cualquier voto o de cualquier ofrenda voluntaria que presenta en holocausto al SEÑOR,

19 para que les sea aceptado será un macho sin defecto, ya sea toro, cordero o cabrito.

20 No ofrecerán ningún animal con defecto, porque no les será aceptado.

21 “Asimismo, cuando alguien ofrezca un sacrificio de paz al SEÑOR, sea en cumplimiento de un voto o sea como una ofrenda voluntaria, para que sea aceptado será sin defecto, tanto de las vacas como de las ovejas. No ha de haber defecto en él.

22 El animal ciego, perniquebrado, mutilado, verrugoso, sarnoso o tiñoso, no lo ofrecerán al SEÑOR. No pondrán de ellos una ofrenda quemada sobre el altar del SEÑOR.

23 “Podrás presentar como ofrenda voluntaria el toro o el carnero que tenga un miembro desproporcionado o atrofiado, pero no será aceptado como cumplimiento de un voto.

24 “No ofrecerán al SEÑOR un animal con los testículos heridos o dañados, arrancados o cortados. No harán esto en su tierra;

25 tampoco los aceptarán de manos de los extranjeros para ofrecerlos como alimento de su Dios. Porque están deformados y tienen defectos; no les serán aceptados”.

26 El SEÑOR habló a Moisés diciendo:

27 “Cuando nazca un ternero, un cordero o un cabrito, estará con su madre siete días. Desde el octavo día en adelante será aceptado en sacrificio, como ofrenda quemada al SEÑOR.

28 “No degollarán en el mismo día una vaca o una oveja junto con su cría.

29 “Cuando ofrezcan al SEÑOR un sacrificio de acción de gracias, lo sacrificarán de manera que les sea aceptado.

30 El mismo día se comerá; no dejarás nada de él hasta la mañana. Yo, el SEÑOR.

31 “Guarden, pues, mis mandamientos y pónganlos por obra. Yo, el SEÑOR.

32 “No profanen mi santo nombre, pues yo he de ser santificado en medio de los hijos de Israel. Yo soy el SEÑOR, el que los santifico,

33 que los saqué de la tierra de Egipto para ser su Dios. Yo, el SEÑOR”.

Privilegios sacerdotales perdidos por la inmundicia

LECTURAS SUGESTIVAS

Levítico 22:1 — No profanéis mi santo nombre en las cosas que me santifican. Las cosas santas no deben tocarse con manos inmundas. Lo que Dios santifica debe ser reverenciado. Tratar descuidadamente cualquier cosa sagrada profana ese Nombre con el que se ha asociado. Si esto se aplica a las ofrendas del altar del tabernáculo antiguo, seguramente se aplica a nuestras cosas santas: las Escrituras, el Santuario, el Día del Señor; porque el Nombre Divino está ligado a ellos, son santificados para Él y no deben ser profanados.

Más enérgicamente, este requisito se aplica a las vidas consagradas a Cristo; no deben ser profanados por la comunión con el mal, no sea que esto lleve a "ser blasfemado ese santo nombre con el que son llamados".

Levítico 22:2 — Esa alma será cortada de Mi presencia . ¿No consumió el fuego devorador a Nadab y Abiú? La imposición de penas tan severas era una medida necesaria en esa época para el cumplimiento del deber, para inculcar ideas correctas sobre la santidad y la autoridad de Jehová. Los sacerdotes, por su acceso privilegiado a Su “presencia”, podrían caer en la cautela; y como sus favores eran especiales, sus advertencias eran enfáticas.

Si vivimos “en la luz”, ¡qué espantosa es la posibilidad de ser arrojados a las tinieblas de afuera! Habiendo predicado a otros, ¡qué miedo pensar en convertirse en un náufrago! Tales posibilidades deberían despertar a las almas privilegiadas a "tener cuidado de no caer".

Levítico 22:10 . — Ningún extraño comerá cosa santa . La hospitalidad se elogia en todas partes en las Escrituras; debemos tener “cuidado de entretener a los extraños. Pero los huéspedes en nuestros hogares, por ese motivo, no se vuelven calificados para compartir los privilegios del pacto de la religión, que están reservados para aquellos que son de Cristo.

La relación con Dios como sacerdote es un asunto personal; y como sacerdote espiritual, cada creyente tiene derecho a sentarse a la mesa sagrada, sí, a festejar en la misma casa de banquetes del amor soberano, pero no tenemos autoridad para extender estos favores divinos a otros que no tienen una relación sacerdotal con Dios, incluso aunque tengan relación doméstica o amistosa con nosotros. La cortesía o la magnanimidad no pueden borrar las distinciones espirituales con las que Dios separa a los hombres.

Levítico 22:11 . — Pero si el sacerdote comprara algún alma con su dinero, comerá . De modo que cuando un alma se convierte en posesión de un sacerdote, comparte los privilegios del sacerdote. Su contraparte está en aquellos a quienes ganamos para Cristo, no por “dinero”, sino por las energías de la persuasión e influencia cristianas; ligado a nosotros en las obligaciones del amor. Nuestros convertidos entran en nuestros sagrados goces: “Vosotros sois todos partícipes de mi gracia” (Filipenses 1:7 ).

Levítico 22:14 . — Si un hombre come de lo santo sin saberlo . Entrometerse donde no debe; aprovechando ventajas para las que no tenía ninguna calificación; disfrutando de la comida sagrada por la que no había prestado ningún servicio sagrado. Esto es “transgresión” (Levítico 22:16 ).

Sin embargo, toda asunción de religión sin ser de corazón religioso, todos los oficios y emolumentos de la iglesia en manos de hombres no cristianos por el bien de "ganancia que por la piedad", esto es profanación, y estos "llevan la iniquidad de la transgresión".

Levítico 22:17 .— La perfección física requerida en los animales sacrificados . Porque sugerían al Cristo perfecto y, por lo tanto, no debían tener ningún defecto; y presagiaron la vida perfecta que los creyentes están llamados a dedicar a Dios: "Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto".

Levítico 22:25 .-Y de mano de un desconocido, etc . Las ofrendas deben ser impecables y el oferente debe estar calificado. Regalos preciosos de manos impías que Dios no puede aceptar. Deje el regalo en el altar y entre primero en una relación sagrada con Dios a través de Cristo. Nuestra posición "en Él" es de suma importancia; hasta que no estemos así " hechos cerca", no podemos aceptablemente " acercarnos ".

Levítico 22:32 . Levítico 22:32 santificado… Yo soy el Señor que te santifico . Es por ese fin sublime que somos santificados. Los hombres buscan su propia salvación, Dios busca su santidad; porque la salvación es una meta egoísta, mientras que la santidad es testimonio de Dios para los hombres y los ángeles. La obra de la gracia divina en nosotros no es, meramente para nuestro beneficio, sino para "adornar la doctrina de Dios nuestro Salvador", para nevar el carácter santo de Dios a aquellos que "nos conocen", y así ayudar a cumplir el oración: "Santificado sea tu nombre".

HOMILIAS DEL CAPÍTULO 22

Tema: UNA SOLEMNA RESPONSABILIDAD POR LAS COSAS SAGRADAS

Que no profanen mi santo nombre en lo que me santifican ” ( Levítico 22:2 ).

La religión es una vida interior sagrada . No consiste en cosas externas, tales como símbolos y ceremonias, que usa y llama en su ayuda, sino en la aceptación del alma con Dios, en su homenaje a Él y en su alegre resignación y servicio a Él.

Sin embargo, la religión tiene su expresión externa en las cosas materiales que " santifica ". Lo hace mediante su consagración al servicio y honor de Dios. Lo que en sí mismo puede ser común y mundano se vuelve sagrado cuando se dedica a propósitos religiosos. Y en este acto de santificar las cosas mundanas, los hombres religiosos muestran su diferencia con los impíos, quienes simplemente guardan todas las cosas terrenales para fines mundanos y humanos, sin dedicar ninguna a Dios. Pero los hijos de Dios tendrán "las cosas que me santifican".

I. LA CAPACIDAD DEL HOMBRE PARA RENDER LAS COSAS SANTIFICADAS .

1. Lugares : Como santuarios dedicados al culto de Dios. Hogares consagrados por la piedad y la oración. Seleccione escenas de retiro , como una cañada secreta donde un alma devota se aparta para meditar, etc., como Isaac en el pozo Lahai-roi. Una habitación o cobertizo humilde , usado para reunir a dos o tres en el nombre de Cristo para lectura y exhortación.

2. Estaciones : como el "día del Señor"; o días señalados, como "días santos"; o una hora fija para doblar la rodilla con algún amigo lejano; o tiempos en los que conmemorar la obra de Dios en la historia.

3. Posesiones : Como riqueza reservada para Cristo; o tiempo deliberadamente determinado para dedicarlo a la obra cristiana; o algún objeto en particular que le dediquemos al Maestro, como la barca de Pedro, que le prestó a Cristo para que predicara a las multitudes en la orilla.

4. Personas : Nuestras propias vidas con todos sus talentos y afectos “se dieron a sí mismos al Señor”; o un niño , como Ana dedicó a Samuel; o un grupo de trabajadores cristianos enviados en una misión específica.

II. LA TENDENCIA DEL HOMBRE A PROFANAR LAS COSAS SALUDADAS .

1. Como cuando cesa la consideración por la santidad de las escenas santas ; el santuario deja de ser en el pensamiento “nada más que la casa de Dios y la puerta del cielo”; o la piedad y la oración en el hogar se desalientan por la negligencia.

2. La consideración por la solemnidad de las temporadas sagradas declina; el sábado no es apreciado como "un deleite, el santo del Señor, honorable"; los tiempos de oración se dejan pasar por alto.

3. El respeto por el derecho divino sobre nuestras posesiones disminuye; “nos quedamos con una parte del precio”; recordamos de su propósito dedicado algún objeto consagrado.

4. El respeto por la verdadera espiritualidad en nosotros mismos y en los demás se desvanece; el "primer amor" se enfría; el anhelo de que nuestro hijo o nuestras familias se conviertan en cristianos disminuye en presencia de sus intereses y perspectivas mundanas.

III. RESPONSABILIDAD DEL HOMBRE DE RESPETAR LAS COSAS SANTIFICADAS .

1. Ya no son nuestras , ni para recordarnos de la consagración ni para desviarnos hacia nosotros. El dinero no era de Ananías después de que él se lo había dado a Cristo. Y " Vosotros no sois vuestro propio". Jurada al Señor, nuestra apropiación de ella, o la desviación de su propósito sagrado, es profanación.

2. El nombre de Dios se identifica con "las cosas santificadas para él". ¡Qué deshonra y escarnio a Dios y a la religión si, por ejemplo , una iglesia se degrada y se convierte en una taberna o un teatro: si un hogar cristiano se degrada en una morada de libertinos y difamadores: si una vida santificada vuelve de nuevo a la vileza de iniquidad. Los burladores entonces "blasfemarán ese santo nombre por el que somos llamados".

3. Cuando algo es “santificado” es un testimonio en medio de la impiedad de la religión y lo invisible . La tendencia del hombre es a absorberse en las cosas materiales, a atender meramente a sus intereses físicos y terrenales. Las "cosas santificadas" a Dios les hablan a los hombres de lo que es divino, espiritual, eterno, y no pueden ser quitadas de entre nosotros sin peligro de que los hombres se hundan más en el oscuro materialismo y pierdan todos los beneficios que el cristianismo ha traído a nuestra nación. vida social e individual.

(a) La Biblia merece ser apreciada como un libro sagrado, sin embargo, cuántos la descuidan ; cuántos se burlan de ella; cuántos la leen solo para desobedecerla.

(b) La cruz es un símbolo de un hecho muy patético, solemne pero precioso: la muerte de Jesús. Sin embargo, para cuántos protestantes se ha convertido en una simple baratija para adorno: mientras que para muchos romanistas se ha convertido en un objeto de superstición idólatra .

(c) El pan y el vino son señales de una redención consumada y de nuestra comunión con Cristo por fe. Sin embargo, pueden ser "comidos y bebidos indignamente, sin discernir el cuerpo del Señor", como si no tuvieran un significado solemne: o pueden ser representados en el "altar" de los ritualistas y en la "misa" papal.

"Entonces ten cuidado,

Y hazte todo reverencia y temor ”.

Di que no profanen mi santo nombre en las cosas que me santifican ”.

Tema: DEFINIR LAS COSAS SANTAS

Cualquiera que vaya a las cosas santas que los hijos de Israel santifican a Jehová, teniendo sobre él su inmundicia, esa alma será cortada de mi presencia: Yo Jehová ” ( Levítico 22:3 ).

Caryl dice: “Los mismos paganos tenían esta idea, no admitirían a nadie en sus servicios religiosos a menos que estuvieran preparados; por eso, uno gritó a la gente cuando venían a sacrificar: 'Todos ustedes, los inmundos y profanos, vayan lejos de estos sacrificios '. No sólo la palabra de Dios, sino la misma luz de la naturaleza les enseñó a no entrometerse en las cosas santas hasta que ellos mismos fueran santificados ".

Prueba de ello es el dicho de Eneas a su padre cuando venía de la guerra, " En genitor ", etc. "Padre, ¿te entrometes en los sacrificios? me he lavado en la fuente ".

Cicerón enseña una noble reverencia por las cosas santificadas: Res sacros non modo manibus attingi, se ne cogitatione quidem violari fas fuit . "Las cosas sagradas no solo no deben tocarse con las manos, sino que no deben violarse ni siquiera con el pensamiento".

Sin embargo, ha habido sacerdotes de nuestra santa religión, sí, ministros del evangelio de Cristo, y hombres en sagrada eminencia, que han difamado al cristianismo con su frivolidad y sacrilegio, hasta que en verdad ...

La religión, ruborizada, vela sus sagrados fuegos . —PAPA.

INCIDENTES ADMONITORIOS:

Belsasar convirtió los vasos consagrados del templo en instrumentos de lujo e intemperancia, tocando cosas santas mientras él mismo estaba inmundo; pero la mano del juicio indignado escribió con letras llameantes sobre su salón de banquetes su sentencia de perdición.

Herodes profanó los sepulcros de los santos con una búsqueda sacramental de los tesoros que se suponía que estaban escondidos allí, cuando Dios hizo subir fuego de la tierra para devorar a los hombres infames que tocaban las cosas santas con su inmundicia sobre ellos.

Antíoco saqueó el mismísimo templo de Dios; Heliodoro vació los tesoros de sus dineros consagrados; Pompeyo profanó el sábado y el santuario; Craso despojó a la casa de Dios de diez mil talentos; pero todas sus carreras cuentan la historia de un juicio mordaz por profanar las cosas santas, esa ruina es siempre la vengadora del sacrilegio.

Judas se atrevió a tocar con manos sucias a la persona sagrada de Cristo y venderlo por dinero; pero la maldición cayó sobre él, y pereció en su iniquidad.

Esa alma será cortada de mi presencia; Yo soy el Señor ".

Tema: IRREVERENCIA ENTRE SANTIDADES ( Levítico 22:1 )

La jerarquía pagana practicaba y ejemplificaba los vicios degradantes de los ídolos que representaban y profesaban propiciar. Jehová declaró la santidad indispensable para un servicio aceptable en Su presencia. A los hebreos se les enseñaba por medio de símbolos, mediante ceremonias que apelaban a sus sentidos, verdades concernientes a la santidad que, según el evangelio, son reforzadas más plenamente por las enseñanzas del Espíritu Santo. A fin de evitar la familiaridad indebida con las cosas santas:

I. HABÍA TRAZADO UNA LÍNEA DE DEMARCACIÓN ENTRE LAS COSAS SAGRADAS Y LAS SECULARES .

Para el desempeño de los deberes sagrados había lugares y tiempos establecidos; ningún sacerdote debía oficiar cuando era física, ceremonial o moralmente impuro. “Di a Aarón ya sus hijos que se aparten de las cosas santas de los hijos de Israel”. ¿Por qué tanta severidad? (a) Porque las cosas sagradas consagraban el nombre del Señor . "Que no profanen mi santo nombre". (b) Porque las cosas sagradas honraban el nombre del Señor . "Estas cosas que me santifican". Todavía se requiere que los que portan los vasos del Señor sean santos y hagan una diferencia entre las cosas sagradas y seculares.

II. Había que trazar una línea de demarcación entre la pureza y la impureza para un personaje .

Ningún sacerdote debía oficiar en el altar en estado de incapacidad, bajo pena de excomunión. "Esa alma será cortada de mi presencia: yo soy el Señor". Esto declara que el sacerdote es falible y frágil; necesidad de vigilancia constante para que no se contamine el altar. Bajo la nueva dispensación, una fuente llena y gratuita está abierta para el pecado y la inmundicia. Como reyes y sacerdotes para Dios, se espera que los creyentes exhiban en sus vidas los frutos del Espíritu. El cristianismo no ha relajado las demandas de la ley para la santidad de carácter, el estándar es aún más alto, porque "Si alguno no tiene el espíritu de Cristo, no es de él". - FWB

Tema: LO MEJOR PARA LOS MÁS Levítico 22:17 ( Levítico 22:17 )

El sacrificio, no el sacerdote oficiante, era el centro de la economía levítica. Existió para el altar, no para él. Si es absolutamente necesario que los sacerdotes sean santos, igualmente para que las ofrendas sean perfectas, especialmente cuando se las considera a la luz de la epístola a los Hebreos como de importancia típica, como sombras de cosas buenas por venir. Cada ofrenda debía ser presentada.

I. CON MENTE DISPUESTA . "Ofrendas voluntarias, que ofrecerán al Señor en holocausto". Los mandamientos autorizados de Jehová no interfirieron con el libre albedrío; se apelaba al juicio y al sentido moral de los oferentes, ellos debían elegir lo que Dios había elegido. A menos que lo hicieran voluntariamente, no podría haber ninguna calidad moral en los servicios que prestaron. No hay virtud, donde no hay posibilidad de vicio, al menos en un estado de prueba . En la construcción del templo se requirió la misma disposición. En el servicio de Cristo hemos de presentarnos dispuestos , así como que viven sacrificios.

II. CON PERFECTA OBEDIENCIA . "No ofrecerá todo lo que tenga defecto". No se debía colocar sobre el altar ninguna cosa malsana o desagradable. El Altísimo merecía , como exigía, lo mejor. La obediencia en el oferente requería, por tanto, ser completa; sin retenciones ni retiradas. (a) Para que no se rompa la santa armonía de la economía. (b) Que el antitipo inmaculado podría ser claramente presagiado .

Dios todavía exige lo mejor que podemos ofrecer, el vigor y la vivacidad de la juventud; las porciones más despiertas y valiosas de nuestro tiempo; los frutos más selectos y ricos de nuestra sustancia .

III. CON UN CORAZÓN AGRADECIDO . "Ni de mano de extraño ofreceréis el pan de vuestro Dios". Las ofrendas debían ser presentadas por aquellos que conocían al Señor y serían impulsadas por amor devoto. El conocimiento de Dios, la reconciliación con Él, debe preceder a las ofrendas en Su altar. El carácter del dador, más que la naturaleza del don, determina la estimación divina de las ofrendas.

IV. CON UN ESPÍRITU LEAL . La constante reiteración de la declaración, "Yo soy el Señor", hizo evidente que todo debe hacerse con la más profunda reverencia por la majestad divina. Los hebreos debían reconocer a Jehová como su rey soberano. El tiempo no ha alterado estas condiciones de oferta aceptable. Energía, tiempo, medios , etc., todo para ser entregado alegremente a Aquel que es nuestro Profeta, Sacerdote y Rey. Le debemos lo mejor de todo; Él sacrificó lo mejor, Su vida, por nosotros; Cuán irresistibles son las palabras del apóstol: “Porque no sois vuestros propios”, etc. — FWB .

Tema : MANCHAS EN NUESTROS SACRIFICIOS

Todo lo que tenga defecto, no lo ofreceréis; porque no os será aceptable ”( Levítico 22:20 ).

Se hace referencia a los sacrificios. Todo servicio religioso tiene la naturaleza del sacrificio.
"Lo que sea, etc." (Texto).
J. Lea este requisito de los sacrificios perfectos, y con él probemos nuestro respeto por los SERVICIOS DEL SÁBADO.

Dios nos ha leído una vez, al menos, una lección muy solemne de la manera en que Él considera los sábados perdidos. Setenta años sabáticos a los que los judíos permitieron salir de su calendario. Pasaron setenta años en cautiverio. Un presagio terrible para nosotros de lo que podría ser el juicio nacional, si, como iglesia y pueblo, pasáramos a borrar de entre nosotros nuestro día de descanso. Y, sin embargo, ¿ese miedo es infundado? ¿No estamos ya muy lejos hacia tal estado de cosas? ¿No es el domingo, hasta cierto punto, un día omitido? ¿El cuarto mandamiento es un mandamiento omitido? Tal como es el domingo, también es la semana.

Es la piedra angular del arco de nuestra vida secular. La locura y el pecado de la mayoría de los hombres es que comienzan por hacer del domingo un día en blanco. Y como un espacio en blanco se vuelve intolerable, el día les resulta apático, cansado, mundano, profano. Es necesario cultivar el gusto por las cosas espirituales y orar por ello. Una mente vaga, un sentimiento embotado, la sensación de que es un día largo cada vez que llega el domingo, son pruebas de que para nosotros el cielo está todavía muy lejos, que el mundo brillante y hermoso no es " nuestro propio lugar ". Para entrar un poco más en detalles, por lo general todos estarán de acuerdo en que si el sábado es obligatorio, entonces seguramente lo es hasta ahora:

1. Que haya asistencia regular al servicio público .

2. De las otras horas del día, que una parte se dedique a los ejercicios devocionales privados , una parte a la lectura religiosa ; que se mantenga un tono de conversación más elevado y sagrado ; que se realice alguna obra de piedad y amor.

Estos son solo algunos de los deberes y goces dominicales más obvios y necesarios. ¿Cuántos de nosotros nos desenvolvemos en este asunto? ¿Tiene el sacrificio de la séptima parte de nuestro tiempo, que profesamos ofrecer semana tras semana, alguna "mancha"? Un día desocupado debe resultar un día desagradable. Omitimos el deber, por lo tanto, Dios omite la bendición. ¿Necesitamos mirar más allá de nuestros domingos, ociosos, etc., por muchas desilusiones, descontentos y amarguras de la vida?

II. Por esta prueba juzguemos nuestra ADORACIÓN DEL SANTUARIO .

Examinarnos en la casa de Dios. Dificultad para mantener la mente serena y devota resulta de la falta de la debida preparación .

1. Algo se puede decir respecto a la postura del cuerpo que asumimos en el santuario. La posición del cuerpo reacciona sobre la mente. La indolencia se asocia y conduce a la irreverencia. Arrodillarse es requerido igualmente por la dignidad de Dios y la debilidad de nuestra naturaleza.

2. Lo mismo ocurre con la voz . Es difícil sobreestimar cuánto se pierde ( a ) Por la belleza de nuestros servicios; ( b ) Para la gloria de Dios; ( c ) A nuestra propia alma, por el silencio que muchos de nosotros mantenemos, tanto en las respuestas como en el servicio del canto. Pero hay más como "imperfecciones" en los sacrificios de nuestro santuario que estos. Dónde está-

(1) ¿El esfuerzo mental constante esencial para la adoración verdadera y apropiado en la presencia de Dios?

(2) ¿La desconfianza en uno mismo debida a criaturas tan pecadoras como nosotros?

(4) ¿La autodisciplina para ponernos a responder al Espíritu de Dios?

(3) ¿La mirada interior hacia arriba en busca de la luz y la gracia divinas?

(5) Recordarnos con frecuencia lo que somos y lo que es Dios.

(6) ¿El simple espíritu de autoaplicación?

(7) ¿La fe para dar alas a la oración?

Bien podría decir Santiago: “No tenéis porque no pedís o pedís mal. “Mancha en el sacrificio” vuelve a apagar la llama.

III. Mediante esta prueba, examinemos nuestra observancia del SACRAMENTO DE LA CENA DEL SEÑOR .

Una palabra de solemne cariño para algunos. Nunca asiste a la Santa Cena para celebrar la muerte del Señor en absoluto. Otros, si acaso, tan irregularmentecasi para convertir la asistencia en una burla. ¿Consideras que aquello con lo que te enfrentas no es otro que el mandato moribundo del Señor y Salvador: el más alto y mejor de todos los medios de gracia? Y, sin embargo, habitualmente lo dejas pasar. ¿Puede haber algún límite para el mal que tal omisión puede acarrear en su alma? Tu religión está desprovista de gozo si tu alma no logra alcanzar la paz; si sus oraciones no funcionan; si tu fe parece no apoyarse en la realidad; si no obtiene el sentido del perdón. Bueno, aquí hay una cadena de causas y consecuencias; debemos dividir sus vínculos. Todas las pérdidas del alma se adhieren a las omisiones del alma. Nota:

1. Felices por nosotros de poder volvernos de todos nuestros pobres sacrificios “manchados” por ese sacrificio puro y perfecto de Cristo , que ha sido ofrecido “sin mancha y sin mancha” por nosotros.

2. Solo que nunca olvidemos que quien quiera confiar con seguridad en el poder de ese “Sacrificio ” para su salvación, debe tomar la inmaculación de ese Sacrificio como modelo diario. — Anón .

Tema: OBEDIENCIA SIN DUDAS CUMPLIDA PEREMPTORILAMENTE ( Levítico 22:31 ).

La peregrinación de Israel por los páramos fue de carácter probatorio, ofreciendo un sugerente emblema de toda la vida humana. La tendencia natural de la voluntad humana a la rebelión requería mandatos imperativos para someterla y someterla a la obediencia de los justos. Los requisitos minuciosos y exigentes del ritual mosaico entrenarían a la gente a la obediencia humilde. Dichos estatutos imperativos se basaron en:

I. LO QUE ERA JEHOVÁ EN ISRAEL . "Yo soy el Señor". El Señor tenía perfecto derecho a imponer a sus súbditos la obediencia que eligiera. En medio de Israel, Jehová era Rey, Su palabra salió con poder. Que todos los habitantes de la tierra le asomen y obedezcan su voz, porque todavía es universalmente cierto: "El Señor reina".

II. LO QUE FUE JFHOVÁ PARA ISRAEL . "Tu Dios." Para llevar a cabo Sus sabios y benevolentes designios hacia la raza, Dios consideró oportuno hacer de Israel Su pueblo elegido, custodios de Su palabra escrita, canales de bendición para todo el mundo. Israel tenía la obligación más solemne de obedecer los estatutos divinos, de ajustarse a la voluntad divina. Bajo la nueva dispensación, ningún motivo más fuerte puede impulsar la consagración y la obediencia cristianas que la declaración del apóstol a los gentiles: "De quién soy, ya quién sirvo".

III. LO QUE JEHOVÁ HIZO POR ISRAEL . "Eso te sacó de la tierra de Egipto". El Éxodo había mostrado la bondad del Señor. Se habían realizado maravillas, se habían abierto canales inesperados de liberación, se les había concedido abundantes suministros. Las obligaciones de obediencia eran muchas y pesadas. La bondad de Dios nos llama al arrepentimiento. La redención de la esclavitud de Satanás y el pecado debería constreñir a la obediencia. Traducido al reino del amado Hijo de Dios, esta es la pregunta que viene al alma: "Señor, ¿qué quieres que haga?"

IV. LO QUE JEHOVÁ HARÍA CON ISRAEL . "Yo soy el Señor que te santifico". El propósito del Señor al seleccionar a Israel como su pueblo peculiar, no era solo que su nombre fuera santificado entre ellos, sino que sus corazones fueran santificados por su presencia. La santidad era el fin supremo del ritual mosaico. Ceremonial y simbólicamente, los sacerdotes y la gente fueron santificados por (a) los ritos que observaban; (b) los sacrificios que ofrecieron; (c) la presencia manifiesta del Señor. — FWB

BOSQUEJOS DE LOS VERSÍCULOS DEL CAPÍTULO 22

Levítico 22:1 .— Tema: LOS CELOS DE JEHOVÁ.

La naturaleza humana es inherentemente propensa a la presunción y la irreverencia. A los sacerdotes se les impuso el cuidado más escrupuloso, para que no se deshonraran y deshonraran a Jehová de alguna manera. Los pequeños regalos no fueron excluidos del altar del Señor, pero todas las ofrendas defectuosas fueron para enseñar a Israel (a) La supremacía de la voluntad divina . Se debe presentar lo que Él requirió, no lo que ellos pudieran sentirse dispuestos a ofrecer.

(b) La necesidad de una obediencia incondicional . "Yo soy el Señor". Suficiente para que Israel supiera que el Señor lo requería de sus manos. El celo de Jehová por Su nombre y gloria inculcaría la necesidad de:

I. CIRCUNPECCIÓN CONSTANTE . Deberes individuales tan intrincados y variados que los sacerdotes necesitarían ejercer una vigilancia implacable.

II. DISCRIMINACIÓN CUIDADOSA . Ofrendas sin mezclar; en estricta conformidad con las instrucciones minuciosamente prescritas.

III. CONSAGRACIÓN COMPLETA . Todo debe hacerse al máximo; sin reserva, deficiencia o retiro. No se tolera ninguna imperfección de siervo o servicio en la adoración del tabernáculo.

Las discapacidades heredadas e inevitables para el servicio público no constituyen una barrera en el camino del favor divino. Se acepta un corazón dispuesto cuando el logro de su propósito sincero es imposible. La voluntad y la capacidad caracterizan el servicio del Templo Superior. Aún debe ejercerse escrupuloso cuidado para que no haya profanación del Nombre, Día, Libro, Casa, Ordenanzas de Dios . — FWB .

Levítico 22:10 - Tema: FIESTA DE HOLT PROHIBIDAS A EXTRAÑOS .

" Ningún extraño comerá cosa santa "

La salvación es común, abierta a todos; pero los privilegios son especiales, reservados a las almas consagradas. [Vea “Lecturas sugerentes” en el versículo.]
Estos “extraños” en la casa del sacerdote representan a personas cercanas al Reino de Gracia pero no dentro de él.

I. LA AMISTAD con los piadosos no confiere calificación para privilegios religiosos . No aunque seamos huéspedes en la casa de un ministro del santuario de Cristo; aunque disfrutamos de la intimidad y el afecto cristianos , por eso nos volvemos calificados para compartir las bendiciones del pacto de la religión.

Las alianzas personales y las intimidades familiares con el pueblo de Dios no nos hacen partícipes de su gracia.

II. El disfrute de INTERCURSOS RELIGIOSOS no crea calificación para privilegios sagrados .

Dentro de la casa del sacerdote habría mucha conversación religiosa y conocimiento del significado de las verdades y deberes religiosos; pero el conocimiento de las cosas divinas y la ventaja de la conversación santa no necesariamente conducen a la vida espiritual.

“Tener todo el conocimiento y comprender todos los misterios de nada sirve” si no hay vida interior y amor personal.

III. La residencia en VIVIENDAS SANTAS no confiere calificaciones para privilegios santos .

Aunque residen en la casa del sacerdote, los "extraños" pueden no participar de la comida del sacerdote.

Asistencia al santuario ; frecuentar lugares santos; estar continuamente cerca del siervo de Dios en escenas sagradas; todo esto puede ser sin piedad personal.

Ser portero en la casa de Dios; un asistente persistente en los servicios sagrados; mantener una conexión constante con el santuario; estos no aseguran ni garantizan un estado de gracia, una calificación para el privilegio de las almas santificadas.
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1. Es mejor ser "forasteros" , cerca del reino, aunque no en el reino, que extranjeros lejos de todos los atractivos y oportunidades de la religión.

2. Aunque sean “extraños”, en el evangelio es posible el camino para que éstos lleguen a ser participantes de las fiestas de la redención y de la gracia. “En aquel tiempo estabais sin Cristo, siendo forasteros de la comunidad de Israel y forasteros”, etc. ( Efesios 2:12 ).

La cercanía a aquellos que son santificados en Cristo Jesús, y espiritualmente “sacerdotes para Dios”, debería ayudar a avanzar en la vida religiosa hasta que aquellos que alguna vez fueron “ extraños”, pero invitados , sean bienvenidos a las fiestas del amor sagrado. [Ver bosquejo en Levítico 22:25 , Holy Ministries rehusó a Extraños ].

Levítico 22:20 .— Tema: SACRIFICIOS SIN MANCHA .

“Pero todo lo que tenga defecto, no lo ofreceréis; porque no os será aceptable ”.
Todo lo puesto sobre el altar para estar libre de (a) enfermedad corporal, (b) deformidad nacional, (c) defectos adquiridos . Estos defectos, emblemas de defectos morales, que descalifican para el servicio bajo el evangelio —pasiones depravadas, conducta torcida, desvío del deber, complacencia en cualquier tipo de pecado— harán que la ofrenda más costosa sea detestable para la mente divina.

Los hombres presentan sacrificios imperfectos al Señor.

I. CUANDO SUS DONES NO SON PROPORCIONADOS A SUS MEDIOS . Muchos profesan dar todo lo que pueden, cuando sólo dan una fracción lamentable de la abundancia con la que Dios los ha prosperado. Dios rechaza tales sacrificios manchados.

II. CUANDO SUS DONES NO SON SÍMBOLOS DEL AUTOSACRIFICIO . No se acepta ninguna ofrenda excepto si se presenta con un espíritu voluntario y devoto; Dios espera sacrificios vivos, la riqueza del amor humano: todo el corazón, la mente, el alma, la fuerza; luego otros dones como evidencias de una completa autoconsagración.

III. CUANDO SUS DONES SE PRESENTAN PARA PROCURAR LA SALVACIÓN . La adoración sensual, las observancias rituales no tienen valor; sólo los méritos del único sacrificio expiatorio de Cristo pueden hacer aceptables los dones más perfectos.

Que el corazón sea entregado íntegramente al Señor, entonces no los difuntos o descompuestos, los desperdicios o sobras, la paja o la escoria, sino lo mejor, lo más costoso y lo más brillante será consagrado al Señor.
Estas cosas leídas a la luz del Nuevo Testamento enseñan: (a) Cuán completamente la impecabilidad de Cristo cumplió con los rígidos requisitos de perfección en los sacrificios judíos. (b) Cómo se adaptaron las ofrendas materiales del tabernáculo para preparar el camino para la proclamación de lo que presagiaban.

(c) Cómo la constante demanda de santidad en las ofrendas y oferentes reiteró los hechos perdurables, que Jehová es inmaculadamente santo; y que “sin santidad nadie puede ver al Señor.” - FWB .

Levítico 22:25 .— Tema: SANTOS MINISTERIOS RECHAZADOS DE EXTRAÑOS .

Si los “extraños” no pudieran comer la fiesta reservada para las almas sacerdotales (comp. En Levítico 22:10 ), Dios tampoco les permitiría ministrar en el altar de Su santuario,

Este interdicto exige:

I. Que los MINISTROS DEL EVANGELIO sean ellos mismos verdaderos hijos de Dios .

II. Que los TRABAJADORES DE LA IGLESIA sean elegidos exclusivamente entre aquellos en comunión espiritual con el pueblo de Dios .

III. Que las OFRENDAS SAGRADAS, las ofrendas colocadas en el altar de la religión, solo son aceptables si el dador es un cristiano sincero .

IV. Que UN ESTADO ESPIRITUAL es la cosa supremamente preciosa en la estima de Dios; no lo que traemos, sino lo que somos nosotros mismos los que traemos la ofrenda .

NOTAS: -

1. Dios aborrece santificaron los servicios por las almas impías . "No te serán aceptados".

2. Una relación de gracia con Dios en Cristo debe preceder a todos los intentos de agradarle mediante el servicio o los dones.

3. Toda ofrenda de almas santas , por pequeña que sea , es un “sacrificio agradable a Dios”, como muestra de filiación y amor.

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