2 Samuel 15:19

I.Tenemos en este pasaje un ejemplo notable del espíritu del verdadero patriotismo, tanto más notable porque, en cierto sentido, patriotismo no es la palabra adecuada para aplicar a Ittai, porque era un extraño y un extranjero, aunque un naturalizado. Israelita. En él tenemos un ejemplo singular de esa devoción a una persona que siempre será la característica principal de la vida cristiana. El legalista puede estar dedicado a un sistema; el moralista puede estar dedicado a una idea; el verdadero cristiano estará dedicado a una Persona, a la persona de un Cristo vivo.

II. Ittai era la clase de hombre que David quería, y es la clase de hombre que Cristo quiere ahora. Hay mucha gente lo suficientemente dispuesta a hacer del Señor Jesucristo una especie de trampolín para ayudarlos a llegar al cielo. Si pueden hacer de Él una conveniencia y Él puede cumplir su propósito en la hora de la muerte, todo estará muy bien. No es lo que quiere el Señor. Los "ciudadanos del cielo" son hombres que participan de la nobleza de su Maestro.

III. Fue el hecho de que David lo había recibido como un exiliado lo que primero unió el corazón de Ittai a él. También somos forasteros y exiliados. Cristo nos da un hogar. Nuestra adopción en Su familia debe ser un motor que nos sobrellevará a través de todas las conmociones de la batalla de la vida y nos hará "más que vencedores por medio de Aquel que nos amó".

W. Hay Aitken, Mission Sermons, primera serie, pág. 168.

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