Pérez - uzza - Es decir, la brecha de Uzza. Dejemos que el disgusto de David en esta ocasión nos advierta, a velar por nuestro espíritu, no sea que cuando Dios nos reprende, en lugar de someternos a Dios, peleamos con él. Si Dios está enojado con nosotros, ¿nos atreveremos a enojarnos con él?

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