Los moveré a celos con los que no son un pueblo, con las naciones paganas, que no son de mi pueblo, que apenas merecen el nombre de un pueblo, por no tener el conocimiento y el temor de Dios, que es el fundamento de toda verdadera política y gobierno, y muchos de ellos desprovistos de todo gobierno, leyes y orden. Y sin embargo, tomaré a estas personas en tu lugar, las recibiré y te rechazaré; lo cual, cuando sucedió, ¿cuán desesperadamente provocó a los judíos a los celos? Una nación necia - De modo que los gentiles eran tanto en la opinión de los judíos como en la verdad y la realidad, a pesar de todas sus pretensiones de sabiduría, que no había nada más necio o brutal que la adoración de ídolos.

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