Epístola de Ignacio a los Efesios

He llegado a conocer vuestro nombre, amado en Dios, el cual habéis adquirido con el hábito de la justicia, según la fe y el amor en Jesucristo nuestro Salvador. Siendo los seguidores[6]

Epístola de Ignacio a los Efesios

He llegado a conocer vuestro anhelado nombre en Dios, el cual habéis adquirido con el hábito de la justicia, según la fe y el amor en Cristo Jesús, nuestro Salvador. Siendo los seguidores[12]

Clemente de Alejandría El Instructor Libro III

Vosotros, amos, tratad bien a vuestros siervos, dejando de amenazar, sabiendo que tanto el Señor de ellos como vuestro está en los cielos; y no hay acepción de personas con Él.”[202]

Clemente de Alejandría Stromata Libro III

Fornicatio autem, et omnis immunditia, vel avaritia, ne nominetur quidem in vobis, sicut decet sanctos, et turpitudo, et stultiloquium.”[22]

Orígenes Contra Celso Libro VI

y aprendiendo el precepto: "Sed imitadores de Dios"[331]

Papa Anterus La Epístola

Y no os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien, sed llenos del Espíritu Santo; hablando entre vosotros con salmos, himnos y cánticos espirituales, cantando y alabando en vuestros corazones al Señor; dando siempre gracias por todo a Dios y Padre en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, sometiéndoos unos a otros en el temor de Cristo»[24].

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