19. Y los hijos de Israel le dijeron. Es dudoso si los embajadores fueron enviados o no por segunda vez, para eliminar todas las sospechas injustas y apaciguar la ferocidad (de los edomitas). Sin embargo, es probable que tengamos la relación de lo que se hizo en uno y la misma expedición. La suma es que los israelitas intentaron todos los medios, para que los edomitas les dieran un pasaje libre y sin molestias: de donde su repulsión podría parecer más dura e intolerable. Pero Dios, con esta prueba, probaría la obediencia de su pueblo. Con respecto a los edomitas, aunque al tomar las armas apresuradamente habrían recurrido a sí mismos solo destrucción, aún así Dios los salvó por un tiempo; no perdonándolos libremente, sino diferiendo su castigo, como es costumbre, hasta su debido tiempo.

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