3. El hijo de la viuda de Naín: Lucas 7:11-17 .

La siguiente narración es una de las que revelan claramente la ternura del corazón de nuestro Señor y el poder que el dolor humano ejerció sobre él. La realidad histórica de este hecho ha sido objetada sobre la base de que sólo Lucas la relata. La crítica siempre razona como si los evangelistas estuvieran influenciados por las mismas premisas históricas que ella misma. La vida de Jesús presentó una rica colección de incidentes milagrosos, que nadie soñó jamás con dar un registro completo de ellos.

Jesús alude a los milagros realizados en Corazín, ninguno de los cuales se relata en nuestros Evangelios. Con una sola excepción, somos igualmente ignorantes de todo lo que se hizo en Betsaida. Es muy notable que, entre todos los milagros que se indican sumariamente en nuestros Evangelios ( Lucas 4:23 ; Lucas 4:40-41 ; Lucas 6:18-19 y paralelos.

, Lucas 7:21 , etc.; Juan 2:23 ; Juan 4:45 ; Juan 6:1 ; Juan 20:30 ; Juan 21:25 ), solo uno o dos de cada clase se relacionan en detalle.

Parece que se escogió el ejemplo más notable de cada clase y que desde el principio no se hizo ningún intento por preservar ningún relato detallado de los demás. Para la edificación, que era el único fin de la predicación popular, esto era suficiente. Diez curas de leprosos no dirían más a la fe que una sola. Pero puede ocurrir que algunos de los numerosos milagros pasados ​​por alto por la tradición, llegaran, a través de fuentes privadas de información, a conocimiento de alguno de nuestros evangelistas, y que éste los insertase en su obra.

Así, bajo la categoría de resurrecciones, la resurrección de la hija de Jairo había ocupado el lugar principal en la tradición, se encuentra en los tres Syn., mientras que otros hechos del tipo, como el que tenemos ante nosotros, habían sido dejados en el antecedentes, sin que por ello sea denegado.

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