Isaías dijo: Oíd la palabra del Señor. Oíd cuál es su juicio sobre esto, y cuán separados están sus pensamientos de los vuestros pensamientos. Fuiste transportado cuando llegaron los mensajeros del rey de Babilonia; a tus ojos parecía la coyuntura más favorable que te podría haber ocurrido; Hiciste un desfile de todas tus riquezas y de tu arsenal, para inducirlos a entrar en alianza contigo contra el rey de Asiria. Pensaste que si pudieras asegurar su amistad y alianza, estarías a salvo; incluso más seguro que poner tu confianza en el Señor Dios de Israel. Pero escucha la palabra del Señor; Mira la locura de tus pensamientos: Esta misma nación, en la que piensas hallar seguridad, es la nación que se llevará todos estos tesoros y llevará a tus hijos al cautiverio.

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