1 Samuel 7:15 , etc. Y Samuel juzgó a Israel -"Según Le Clerc", dice el Sr. Locke, "estas palabras no podrían haber sido escritas por Samuel. Pero seguramente la objeción es muy débil; porque todo lo que dice el texto viene solo a esto, que Samuel descargó su oficio con la mayor exactitud, y que se dedicó a él todos los días de su vida.

¿Qué hay en esto que pueda llevar a pensar que él no escribió estas palabras, y así hacer justicia a su propia fidelidad? Y aun suponiendo que la mano de Esdras, o de cualquier otra persona, pudiera haber insertado estos versos en el texto, se seguiría de ahí que el cuerpo de la obra no fuera de la pluma de Samuel, como lo harían Hobbes y sus seguidores. ¿inferir?"

REFLEXIONES.— Grandes fueron las bendiciones que siguieron a esta victoria bajo la sabia y enérgica administración de Samuel.

1. Los filisteos estaban tan quebrantados e intimidados, que no dieron más disturbios a Israel mientras Samuel presidía, sino que les entregaron pacíficamente todas las ciudades que habían tomado entre Ecrón y Gaza. Y los amorreos, ahora aterrorizados, se alegraron de quedarse tranquilos; de modo que la paz se restableció perfectamente dentro de sus fronteras. Nota; (1.) Cuando los caminos del hombre agradan al Señor, hace que sus enemigos estén en paz con él. (2.) La oración y la penitencia pueden hacer más por una nación que la espada.

2. La paz interior del pueblo les fue asegurada por la administración regular de justicia. Samuel fue su circuito anual a Betel, Gilgal y Mizpa, donde escuchó y determinó las causas que le fueron presentadas; y en su residencia en Ramá, juzgó a Israel, quien trajo allí sus quejas, y se mantuvo firme en sus decisiones; y tal vez fue allí para adorar y ofrecer sacrificios, para escuchar su predicación y participar de sus oraciones; porque Samuel había construido un altar en Ramá, ya que todavía no se había fijado ningún otro lugar para las ofrendas declaradas a Dios.

Como profeta levantado por Dios, podría estar autorizado para ofrecer sus propios sacrificios y los del pueblo allí, hasta que el arca y la adoración del tabernáculo se establecieran nuevamente. Nota: (1.) La administración de justicia imparcial es una de las mayores bendiciones de las que puede disfrutar cualquier país. (2.) Serán rectos en sus decisiones entre los hombres, quienes, como Samuel, siempre tienen a Dios delante de ellos y caminan en su temor y adoración. Un juez irreligioso no puede ser verdaderamente imparcial.

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