CAPÍTULO VI

Después de que el arca estuvo siete meses en la tierra de los

filisteos, consultan a sus sacerdotes y adivinos sobre

enviarla a Silo, 1, 2.

Aconsejan que sea enviada de vuelta con una ofrenda de

cinco esmeraldas de oro y cinco ratones de oro, 3-6.

Aconsejan también que se devuelva en un carro nuevo, tirado por

dos vacas lecheras de las que se atarán sus crías; y

concluyen que si estas vacas toman el camino de

Beth-hemesh, como si fueran a la frontera israelita, entonces el SEÑOR

las había afligido, si no, entonces sus males eran accidentales, 7-9.

Hacen lo que se les indica; y las vacas toman el camino de Bet-semes,

10-13.

Se detienen en el campo de Josué, y los hombres de Bet-semesh

las toman y las ofrecen al Señor en holocausto,

y cortan la madera del carro para quemarlos, y hacen 

otras ofrendas, 14, 15.

Las ofrendas de los cinco señores de los filisteos, 16-18.

Por mirar con demasiada curiosidad al arca, los hombres de Bet-semesh

son castigados por el Señor, 19, 20.

Envían a los habitantes de Quiriat-jearim, para que

que se lleven el arca, 21.

NOTAS SOBRE EL CAP. VI

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad