Verso Éxodo 34:21. En el tiempo de la espiga y de la cosecha descansarás.  Este mandamiento es digno de mención especial; muchos quebrantan el sábado con el pretexto de una necesidad absoluta, porque, si en el tiempo de la cosecha el tiempo resulta ser lo que se llama malo, y el día de sábado es justo y bueno, juzgan perfectamente lícito emplear ese día en tratar de salvar los frutos del campo, y piensan que la bondad del día más allá de lo anterior, es una indicación de la Providencia para que se emplee así. Pero, ¿no es el mandamiento anterior el que apunta directamente contra esto? He sabido que esta ley se ha infringido a menudo con este pretexto, y nunca he podido descubrir un solo caso en el que las personas que actuaron de este modo hayan tenido un éxito mayor que sus vecinos más conscientes, que no se aprovecharon de tales circunstancias favorables, estando decididos a cumplir la ley de Dios, incluso en perjuicio de sus intereses seculares; pero ningún hombre ha sufrido jamás una pérdida por un apego consciente a su deber para con Dios. El que está dispuesto y es obediente, comerá el bien de la tierra; pero Dios distinguirá siempre en su providencia a los que respetan sus mandamientos.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad