Hechos 19:41

Verso Hechos 19:41 . Despidió la asamblea... την εκκλησιαν. Otra prueba de que la palabra εκκλησια, que generalmente traducimos iglesia, significa una asamblea de cualquier tipo, buena o mala, legal o ilegal.

1. ¡Qué fuertes son las palabras correctas! De la conducta de este hombre prudente y sensato, podemos aprender cuánta influencia pueden tener personas de este carácter, incluso sobre la multitud desenfrenada. Pero, donde el poder civil se asocia con el poder anárquico de los muchos, HAY confusión y toda obra mala. ¡Qué bendición para la comunidad es la ley civil! Si no fuera por ella, la multitud irreflexiva destruiría a los demás, y al final se destruiría a sí misma. La ley y la justicia provienen de Dios; y el poder civil, por el que se apoyan y administran, debe ser respetado por todos los que consideran la seguridad de sus personas o bienes.

2. Aunque el ministerio de San Pablo fue muy bendecido en Éfeso, y su predicación parece haber sido muy popular, sin embargo, este sol se oscureció pronto: la paz con el mundo no puede durar mucho tiempo; el camino del Señor siempre tendrá la oposición de los que aman sus propios caminos.

3. ¡Cuán pocos harían una profesión externa de religión, si no hubiera una ganancia relacionada con ella! Y, sin embargo, como se observa justamente, la religión se hace provechosa sólo por alguna parte externa de la misma. Por esta misma razón, la parte externa de la religión está siempre en aumento, y nadie puede encontrar fallas en ella sin levantar tormentas y tempestades; mientras que la parte interna se desperdicia y decae, sin que nadie la tome en serio. Demetrio y sus compañeros no habrían hecho ningún revuelo por su culto, si la predicación del apóstol no hubiera tendido a desacreditar aquello por lo que obtenían su riqueza. La mayoría de los gritos que se han hecho contra todos los renacimientos de la religión, renacimientos por los que la Iglesia ha sido llamada a volver a sus principios primitivos y a su pureza, han surgido por interés propio. El grito de la Iglesia está en peligro, sólo ha sido repetido por aquellos que encontraban sus intereses seculares en juego; y sabían que la reforma debía desenmascararlos y mostrar que a los siervos perezosos y malvados no se les podía permitir seguir viviendo de las rentas de esa Iglesia que ellos deshonraban con sus vidas, y corrompían con sus falsas doctrinas. El que come el pan de la Iglesia debe hacer el mundo de la Iglesia: y al que no trabaje no se le debe permitir comer.