La provincia de Judea, sujeta a los persas, como lo fue después a los romanos; aunque, en la actualidad, se les permitió tener gobernadores de su propia nación. (Menochius) --- Reproche, a causa de los enemigos circundantes. (Haydock) --- Fuego, recientemente; (Menochius. Ver 1 Esdras iv. 12., y xi. 9.) o más bien por Nabucodonosor; como los reyes de Persia no permitirían que la ciudad fuera fortificada por temor a una nueva rebelión.

(Lyranus) (Tirinus) --- Nos encontramos con que poco progreso (cap. Ii. Y iv; Calmet) al menos se había hecho en la obra, aunque la culpa debe recaer más bien en los enemigos de Israel, que en varios de los reyes de Persia, que parecen haber autorizado la empresa, que Cambises, o Smerdis, habían interrumpido durante un tiempo. Solo especifican, efectivamente, que se concedió permiso para construir el templo. Pero les permitieron erigirse casas para ellos, lo que no se podría haber hecho para ningún propósito, entre tantos enemigos, a menos que hubieran sido defendidos por algún tipo de fortificaciones. (Haydock)

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad