Misericordias. Nos acostumbramos a los efectos ordinarios de la gracia, que siempre son admirables; y sólo nos asombran las conversiones y los sucesos milagrosos. (Orígenes) --- Alguna manifestación del poder divino parecía ahora un requisito para liberar a David de un rival tan poderoso como Saúl. (Calmet) --- Siríaco, "Señor, haz que tu santo aparezca como un prodigio, como el Salvador de los que esperan en ti". (San Jerónimo) --- "Oh tú, Salvador de los que esperan". (Haydock)

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad