Todos estos eran los hijos de Aser, jefes de la casa de su padre, los hombres más influyentes al frente de estas divisiones, hombres escogidos y valientes, jefes de los príncipes. Y el número a lo largo de la genealogía de los que estaban aptos para la guerra y la batalla, su registro para el servicio en la guerra, aparentemente la referencia era solo a la poderosa familia de Heber, era de veintiséis mil hombres. Este gran aumento fue una prueba de la abundante bendición del Señor.

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