¿Tengo necesidad de locos para que hayas traído a este tipo para que se haga el loco en mi presencia? El rey evidentemente temía daño personal por parte de David, quien, según él pensaba, se había vuelto loco. Si bien el plan de David de pasar desapercibido entre los filisteos no tuvo éxito, la presencia de ánimo que hizo que simulara un ataque de locura sin duda le salvó la vida. Así Dios puede proteger y liberar a sus hijos en medio de los enemigos. Sin su voluntad, ni un cabello de nuestra cabeza cae a tierra.

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