Tampoco te casarás con ellos, convirtiéndote así en aliado de ellos por lazos de parentesco; No darás tu hija a su hijo, al hijo de ningún miembro de estas naciones, ni tomarás su hija a tu hijo, porque el dar en matrimonio es prerrogativa de los padres hasta el día de hoy.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad