¿A quién pasas tú, a saber, Egipto con su rey, en hermosura? ¿Dónde había un pueblo pagano más hermoso o más excelente que Egipto? Sin embargo, aquí sale el mandamiento: Desciende y acostarte con los incircuncisos para compartir el destino de otras naciones paganas; pues Egipto, después de todo, no podía exigir preferencia por sí mismo y esperar exención cuando otras naciones grandes y gloriosas hubieran sido derrocadas.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad