" Y los jefes de Siquem pusieron emboscadas contra él en las estribaciones de las montañas, y robaron todo lo que pasaba por ese camino y le fue informado a Abimelec".

La forma de rebelión que se produjo se debió a su codicia por el oro. Debemos recordar que muchos de ellos eran antiguos Habiru. Estos 'hombres principales de Siquem', la mayoría de la clase dominante, organizaron emboscadas contra los viajeros que pasaban para apoderarse de sus riquezas. No se trataba, pues, de una banda ilícita de ladrones, sino de una política pública impulsada por algunas autoridades.

Es poco probable que fuera una nueva empresa. Probablemente lo habían estado haciendo en secreto a lo largo de los años. Pero ahora lo hicieron abiertamente. Estaba 'en su contra' porque, como príncipe de Israel, interferiría con su recaudación de peajes y porque era su responsabilidad asegurarse de que su pueblo pudiera viajar con seguridad. También interferiría con el comercio. Si las rutas a Siquem entre las montañas fueran inseguras, los comerciantes evitarían Siquem. La información pronto llegó a Abimelec, sin duda informada con indignación por los viajeros. Este fue su primer trato traicionero.

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