El hombre sin valor ( Proverbios 6:12 ).

Llegamos ahora a la tercera persona del triunvirato. El primero comprometió en garantía lo que no tenía. Fue ingenuo. El segundo era demasiado vago para hacer algo para mantenerse a sí mismo. Fue un tonto. Pero este tercero es un burlador. Es totalmente indigno de confianza. Se le llama "un hombre belial", un "hombre sin provecho", un hombre en el que no hay nada bueno, por lo tanto, un hombre sin valor. Se notará que Salomón no le apela. Él lo ve como un caso desesperado del que ser advertido. Simplemente lo describe a él y a su fin.

La subsección se divide en dos partes, la primera define al hombre sin valor, la segunda enumera siete cosas que YHWH odia. Existe una superposición considerable. El hombre indigno tiene boca perversa, ojos insolentes y poco confiables, pies amenazadores, dedos que indican malestar y un corazón perverso que maquina el mal continuamente. Peca con cada parte de su anatomía. Las siete cosas que YHWH odia incluyen una lengua mentirosa, ojos altivos, pies veloces para correr al mal, manos que derraman sangre inocente y un corazón que inventa imaginaciones perversas.

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