Que has guardado con tu siervo David mi padre lo que le prometiste; tú también hablaste con tu boca, y lo has cumplido con tu mano, como en este día.

Ver. 24. Que has guardado con tu siervo David. ] Ver 1 Reyes 8:15 . Podemos orar con un buen propósito, aunque con las mismas palabras que antes. El mismo Cristo lo hizo en su agonía cuando oró más fervientemente. Consuele esto a quienes se quejan de que no pueden variar sus peticiones.

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