Y sus príncipes dieron voluntariamente al pueblo, a los sacerdotes y a los levitas: Hilcías, Zacarías y Jehiel, príncipes de la casa de Dios, dieron a los sacerdotes para las ofrendas pascuales dos mil seiscientos [ganado menor], y trescientos bueyes.

Ver. 8. Y sus príncipes dieron de buena gana. ] Heb., A la liberalidad. Vea la fuerza del buen ejemplo. Estos príncipes no fueron ninguno de los mejores, como aparece en Sofonías.

Dos mil seiscientas reses pequeñas. ] Esto estos sacerdotes no podrían haber hecho si no hubieran sido ricos y bien formados, como decimos.

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