Entonces el rey Sedequías envió, y llevó al profeta Jeremías a la tercera entrada que está en la casa de Jehová. Y el rey dijo a Jeremías: Te preguntaré una cosa; no me escondas nada.

Ver. 14. Entonces Sedequías… llevó a Jeremías a la tercera entrada.] Que estaba justo enfrente de la casa del rey. Este desdichado rey estaba tan intimidado por sus consejeros que no se atrevió a aconsejar al profeta de Dios en su presencia o en su intimidad.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad