Entonces Israel envió mensajeros al rey de Edom, diciendo: Te ruego que me dejes pasar por tu tierra; pero el rey de Edom no los escuchó. Y de la misma manera enviaron al rey de Moab, pero él no quiso [consintió], e Israel se quedó en Cades.

Ver. 17. Entonces Israel envió mensajeros. ] En algunos casos, las disculpas son muy necesarias, si no vocales, pero reales, para detener la boca abierta y aclarar nuestra inocencia.

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