Salmo 24:1-6

1-6 Nosotros mismos no somos nuestros; nuestros cuerpos, nuestras almas, no lo son. Incluso los de los hijos de los hombres son de Dios, que no lo conocen, ni son dueños de su relación con él. Un alma que conoce y considera su propia naturaleza, y que debe vivir para siempre, cuando haya visto la ti... [ Seguir leyendo ]

Salmo 24:7-10

7-10 La espléndida entrada aquí descrita, se refiere a la entrada solemne del arca en la tienda que David le lanzó, o el templo que Salomón construyó para ella. También podemos aplicarlo a la ascensión de Cristo al cielo, y la bienvenida que se le da allí. Nuestro Redentor encontró las puertas del c... [ Seguir leyendo ]

Continúa después de la publicidad