Sin motivo - Para que me vaya. Más grande tú el otro - Esto podría decir de verdad, porque aunque el otro era en sí mismo un pecado mayor, sin embargo, este era un acto de mayor crueldad, y una mayor calamidad para ella porque la exponía a la infamia pública y al desprecio, y además, convirtió una ofensa privada en un escándalo público, para gran deshonra de Dios y de su pueblo, y especialmente de toda la familia real.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad