Sansón dijo: Sansón es culpable tanto del pecado de mentir como de una gran insensatez al alentar sus preguntas, que al principio debería haber comprobado; pero como había abandonado a Dios, así Dios lo había abandonado ahora; de lo contrario, la repetición frecuente y vehemente la insistencia en esta pregunta fácilmente podría haber levantado sospechas en él.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad