Amós 8 - Introducción

Hambre de escuchar la palabra de Dios

amós ocho

En esta sección de las Escrituras, Dios le mostró a Amós una canasta de frutas de verano. La fruta estaba muy madura. Cuando la fruta está muy madura como esta, está lista para echarse a perder. Dios quería que Israel entendiera que el fin estaba cerca y que estaban listos para el juicio.

Dios nuevamente describió los pecados de Israel. Habían engañado y destruido a los pobres de la tierra. La adoración no significaba nada para ellos. Querían que se diera prisa y terminara para poder volver a sus asuntos. Estafaron a la gente en tratos comerciales usando pesos y medidas falsos. Despreciaron a los pobres vendiéndolos como esclavos por el valor de un par de zapatos. Vendieron a los pobres la parte sin valor del grano como si tuviera todo su valor.

Dios prometió que recordaría los pecados de Israel con juicio severo. El juicio sería horrible. El día que vendría fue descrito como un día de luto. También sería un día de hambre para la palabra de Dios. Los que confiaban en los ídolos caerían para no volver a levantarse.