2. Ofrendas festivas (45:18-25 )

TRADUCCIÓN

(18) Así dice el Señor DIOS: En el mes primero, en el primer día del mes, tomarás un becerro sin defecto; y limpiarás el santuario. (19) Y el sacerdote tomará de la sangre de la ofrenda por el pecado, y la pondrá sobre los postes de la puerta de la casa, sobre las cuatro esquinas del borde del altar, y sobre los postes de la puerta del atrio interior. . (20) Y así haréis en el séptimo día del mes por todo el que yerra, y por el simple: así haréis expiación por la casa.

(21) En el mes primero, a los catorce días del mes, tendréis la pascua, fiesta de siete días; se comerán panes sin levadura. (22) Y en ese día el príncipe preparará para sí mismo y para todo el pueblo de la tierra un becerro como ofrenda por el pecado. (23) Y los siete días de la fiesta hará holocausto al SEÑOR, siete becerros y siete carneros sin defecto, cada día los siete días; y un macho cabrío cada día como ofrenda por el pecado.

(24) Y preparará una ofrenda de cereal, y un efa por becerro, y un efa por carnero, y un hin de aceite por efa. (25) En el mes séptimo, a los quince días del mes, en la fiesta solemne, hará lo mismo por siete días; según la ofrenda por el pecado, según el holocausto, según la ofrenda de harina y según el aceite.

COMENTARIOS

Las normas relativas a las ofrendas festivas esbozadas aquí presuponen las instrucciones más detalladas que se encuentran en el Pentateuco. Algunos de los sacrificios de los que se habla aquí y en los siguientes Capítulos no se conocían en el Templo de Salomón. Algunos eruditos sostienen que los sacrificios descritos aquí tenían la intención de reemplazar las regulaciones mosaicas con respecto a estos días santos. Otros ven estos sacrificios como adicionales a los estipulados en la ley mosaica. Aún otros ven estos sacrificios como autorizados solo para el período de la dedicación del nuevo Templo.

Ezequiel 45:18-20 habla de la celebración de Año Nuevo La sangre de un becerro se emplearía para purificar el santuario el día de Año Nuevo ( Ezequiel 45:18 ). La sangre de esa ofrenda por el pecado sería untada en los postes del Templo, en las cuatro esquinas de la cornisa mayor del altar (cf.

Ezequiel 43:20 ), y en el poste de la puerta[534] del atrio interior ( Ezequiel 45:19 ). Estas acciones debían repetirse el séptimo día del mes. Este ritual servía para limpiar el área sagrada de aquellos que por ignorancia se habían adentrado en un área restringida del patio del Templo.

[534] La palabra puerta puede usarse aquí en un sentido colectivo de las tres puertas del atrio interior.

En Ezequiel 45:21-24 Ezequiel habla de la Pascua. Esta fiesta conmemoraba la liberación de los judíos de Egipto. Se celebraba el día catorce de Nisán, el mes primero. Esta fiesta de primavera duraba siete días durante los cuales sólo se comía pan sin levadura ( Ezequiel 45:21 ).

El príncipe debía preparar, es decir, proveer, un becerro como ofrenda por el pecado por sí mismo y por el pueblo ( Ezequiel 45:22 ). Ningún sacrificio de este tipo estaba relacionado con la Pascua en la dispensación de Mosíaco. Además del becerro de la ofrenda por el pecado, el príncipe debía proveer para los holocaustos siete becerros y siete carneros en cada uno de los siete días de la fiesta, así como un macho cabrío cada día para la ofrenda por el pecado ( Ezequiel 45:23 ).

Junto con cada becerro y carnero, el príncipe debía proporcionar un efa de grano y un hin de aceite ( Ezequiel 45:24 ).

La fiesta de los Tabernáculos ( Ezequiel 45:25 ) se observaba durante Tishri, el séptimo mes. Durante este alegre festival de siete días, el príncipe debía duplicar las ofrendas requeridas durante la Pascua.

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