2 Y vi un ángel fuerte que proclamaba a gran voz: ¿Quién es digno de abrir el libro y de desatar sus sellos?

3 Y nadie, ni en el cielo, ni en la tierra, ni debajo de la tierra, podía abrir el libro, ni mirarlo.

El ángel estaba buscando a alguien que fuera digno de abrir el libro y leerlo, pero no se pudo encontrar ninguna simiente natural del hombre en el universo para abrir el libro. Esto se debe a que todos pecaron y nadie es digno ( Romanos 3:23 ). Incluso el ángel fuerte no abriría el libro porque tenía que ser un pariente redentor descendiente de Adán.

Después de que Adán pecó, ya no era digno de administrar la tierra. La tierra fue puesta bajo la administración del príncipe de los ángeles (Satanás). Él tendrá autoridad sobre la tierra hasta que se encuentre un pariente redentor que cumpla con el requisito de redimirla. Gran parte de la Biblia describe el esfuerzo que hizo Satanás para impedir que un pariente redentor descendiera de Adán y llevara una vida sin pecado.

Cuando Satanás, el gobernante de este mundo, permitió que un hombre sin pecado muriera y fuera al Hades, violó la ley de Dios y fue cómplice del crimen. Fue expuesto como el asesino que es. Dios resucitó a este hombre inocente de entre los muertos a una nueva creación y condenó a las autoridades gobernantes de este mundo. Jesús resucitado ha pagado el precio de compra para ser el pariente redentor y todo poder y autoridad sobre la tierra ha sido restaurado a este segundo Adán.

Si los gobernantes de este mundo hubieran sabido acerca de este plan de Dios para redimir la tierra, no habrían crucificado al Señor de la Gloria ( 1 Corintios 2:8 ).

La demora desde Su muerte vencedora hasta que se desenrolló el rollo fue para que muchos se salvaran al nacer en esta nueva creación espiritual llamada el Cuerpo de Cristo. Este es el cuerpo que Él creó y entregó para todos aquellos que confían en Él para cubrir sus pecados con Su sacrificio de sangre.

El libro de Rut es una profunda obra de teatro en vivo que es valiosa para hablarnos de estas verdades. El papel de Rut es un presagio de la Iglesia del Nuevo Pacto, Noemí está en el papel de Israel y Booz es la figura de Cristo pariente redentor. En la obra, Booz (Jesús)  se casa con la gentil Rut   (la Iglesia) y restaura   a Noemí en la tierra   (Israel). El destino de Noemí   es amamantar   al hijo de Booz y Rut   (el destino de Israel es criar adecuadamente a los nacidos en el Reino milenario de Dios en la tierra)  nacidos después de la gran cosecha  (después de la siega del tiempo del fin).

Podría valer la pena notar que Rut está a los pies de Booz durante el tiempo de la trilla de la cosecha (una percepción del éxtasis anterior a la tribulación).

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