Fue mero miedo lo que llevó a los gabaonitas a actuar como lo hicieron. Buscaron la unión con el pueblo de Dios, no por su propio bien, sino para salvar sus vidas. Los motivos de Rahab eran más elevados ( y sigs.). Por lo tanto, fue adoptada en Israel; los gabaonitas quedaron para siempre siervos de Israel.

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