Respecto a lo que el Señor dijo: No entraréis a ellos. Esto se refiere especialmente a los hititas y los sidonios, y en consecuencia al resto de las siete naciones de Canaán, con quienes se les prohibió casarse ( Éxodo 34:16 ; Deuteronomio 7:3,) por la importante razón aquí mencionada. Porque aunque pudieran casarse con mujeres de otras naciones, si estas mujeres abrazaran la religión verdadera, sin embargo, de las siete naciones de Canaán podrían no hacerlo, aunque estuvieran convertidas a su religión; no sea que el veneno aceche y se esconda, y al fin brote y los infecte. Grande fue la previsión con la que Dios dotó a Moisés al dar este precepto, como señala Grocio; y el no observarlo fue de consecuencias fatales para los israelitas, y sentó las bases de su completa ruina. Salomón se unió a ellos con amor . Les tenía un cariño extravagante. Tenía mucho conocimiento; pero ¿con qué propósito, cuando no sabía cómo gobernar sus apetitos?

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