Que vaya mi hermano Amnón con nosotros , es decir, con él y el resto de sus hermanos, como aparece en el siguiente versículo. David se propuso, al parecer, mantenerlo en casa con él, como si fuera su hijo mayor y heredero de su reino; de lo contrario Absalón nunca habría hecho mención especial de él, lo cual, como consecuencia de lo que dijo el rey, ahora se vio obligado a hacer. El deseo de Absalón de la compañía de Amnón tampoco requería pretensiones engañosas, ya que, viendo que el rey no lo haría, el que estaba junto al rey en dignidad podría honrarlo con su presencia; y que esto podría ser una muestra pública de amistad entre él y su hermano, a pesar de la anterior ocasión de diferencia.

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