Te sitiará en todas tus puertas. Así hicieron Salmanasar, Senaquerib y Nabucodonosor. Ver 2Re 18: 9-10; 2 Reyes 18:13 y 2 Reyes 25:10 . Pero esta predicción fue especialmente cumplida por los romanos, a quienes se vieron obligados a ceder los mejores lugares fortificados de Judea, como puede verse en la Historia de la guerra judía de Josefo, que es el mejor comentario sobre esta parte de la profecía. Y bien podría decirse que los judíos confiaban en sus altos y vallados muros; porque rara vez se aventuraban a luchar en campo abierto. En particular, confiaban en la fortaleza y situación de Jerusalén, como lo habían hecho antes que ellos los jebuseos, los antiguos habitantes del lugar, 2 Samuel 5:6 .

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