El robo de los impíos los destruirá. El daño que hagan a otros, ya sea por Dios o por los hombres, será devuelto sobre sus propias cabezas; porque se niegan a juzgar. Se entregan voluntaria y obstinadamente a prácticas injustas. El camino del hombre El curso de la vida del hombre, de la vida de cada hombre, como es por naturaleza o en su estado corrupto; es perverso y extraño Perverso y alejado de Dios, y de la integridad primitiva del hombre, y de la regla que Dios le ha dado para dirigir sus acciones, a saber, la razón y la Escritura; pero en cuanto al puro, su obra es recta Su conversación, su temperamento, palabras y obras; sus diseños y compromisos están de acuerdo con esa regla.

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